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EL CONEJO
El Miedo
Conejito asustado…
Por favor, ¡suelta tu miedo!
Correr no hace que cese el dolor
Ni convierte en luz las tinieblas.
Un día la caminante del ojo y el conejo iban caminando y se detuvieron a descansar junto al sendero. El conejo dijo:
- Tengo sed.
La bruja tomo una hoja, sopló sobre ella y tendió al conejo una calabaza llena de agua. El conejo se bebió el agua pero no dijo nada. Después dijo:
- Tengo hambre.
La bruja agarró una piedra cómo sopla sobre ella y la convirtió en un nabo. Ofreció el nabo al conejo para que la comiera. El conejo lo probó y después lo engulló golosamente. Pero en esta ocasión tampoco dijo nada.
Ambos continuaron por el camino, que conducía a las montañas. Cerca de la cumbre, el conejo tropezó, cayó y rodó casi hasta el fondo de la ladera. El conejo se hallaba en un estado muy lamentable cuando la caminante del ojo llegó hasta él.
Uso un ungüento mágico para liberarle de su gran dolor y recomponer sus huesos rotos. El conejo no dijo nada. Algunos días después la caminante del ojo fue en busca de su amigo. Lo busco por todas partes, pero no lo encontró. Finalmente se dio por vencida. Un día, se topó con el conejo por casualidad.
- CONEJO,¿ porque te estás escondiendo y me estás evitando? Pregunto la bruja.
- Porque tengo miedo de ti. Tengo miedo de la magia, contestó el conejo, encogiéndose asustado.¡Déjame!
- Ya veo. Dijo la caminante del ojo he usado mis poderes mágicos para ayudarte, y tú me vuelves la espalda y rechazas mi amistad.
- No quiero tener nada que ver contigo o con tus poderes. Replicó el conejo. Ni tan siquiera advirtió las lágrimas que sus palabras estaban provocando en la caminante del ojo. Espero que nunca nos volvamos a encontrar y espero no volverte a ver.
- Conejo. Dijo la bruja, una vez fuimos grandes amigos y compañeros, pero esto se acabó. Tengo el poder de destruirte, pero a causa del pasado y las medicinas que hemos compartido, no lo haré. Pero desde este día lanzo una maldición sobre ti y tu tribu. A partir de ahora, llamaras a tus miedos y estos acudirán. Sigue tu camino, puesto que las dulces medicinas que nos unían como amigos se han deshecho.
Ahora el conejo he es el llamador del miedo. Sale de su madriguera y grita:
- ¡ Águila, tengo mucho miedo de ti!
Si el águila no lo oye, el conejo la llama más alto.
- Águila ¡ mantente lejos de mí!
El Águila esta vez ha oído al conejo, de modo que se acerca a él y se lo come. El conejo llama los linces, a los lobos, a los coyotes e incluso las serpientes hasta que acuden.
Como muestra la historia, las personas de la medicina del conejo tienen tanto miedo de las tragedias, de las enfermedades, de los desastres y de los que les tomen el pelo que llamar a estos miedos para que acudan a ella y les den lecciones. Aquí, el punto fundamental es este:¡aquello a lo que te resistas persistirá! Aquello que más temas es aquello en lo que te convertirás.
Esta es la lección. Si tomaste el conejo, deja de hablar de las cosas horribles que puedan suceder y borra la expresión”¿y si…?” de tu vocabulario. Esta carta puede indicar un momento de preocupación por el mañana o que intentas ejercer su control sobre lo que aún no tiene forma. El futuro.¡Detente ya! Escribe en un papel tus miedos y disponte a sentirlos. Lleva tu respiración hasta ellos y siéntelos recorrer tu cuerpo hasta que lleguen a la madre tierra. Ofrecérselos a ella como un regalo.
Invertida
El conejo en la posición invertida es el sentimiento paralizante que experimenta el conejo cuando se ve acosado. Si estás intentando resolver una situación en tu vida y eres incapaz de hacerlo, puede ser que te sientas paralizado aunque te muevas punto esto puede indicar que debes esperar que las fuerzas del universo se pongan de nuevo en marcha. También puede indicar la necesidad de que te detengas y tomes un descanso. En cualquier caso, esta carta en posición invertida siempre indica que es el momento de que revalúe el proceso por el que estás pasando y de que deshagas de cualquier sentimiento negativo, obstáculo o compulsión. Dicho de otro modo, no podrás ejercer su influencia hasta que te acomodes tu manera de ver tu actual conjunto de circunstancias.
Para cualquier situación siempre hay una salida, porque la fuerza universal siempre está en movimiento. Lo que te permite tener éxito es la manera en que afrontan los problemas.
Captas la indirecta del conejo. Escóndete en un lugar seguro para cuidarte y suelta tus miedos, hasta que vuelva a ser el momento de regresar al prado, libre de los Merodeadores que quieren tomar algo de tus suculenta energía.
Josan El Alquimista
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